Ejercicio Profesional I

Una vez egresados de la facultad, debemos hacer proyectos sobre nuestro futuro ejercicio profesional. Sin dudas, la prioridad será capacitarnos para ejercer responsablemente en cualquiera de las modalidades que veremos.

El nivel de grado nos da las bases y el conocimiento para nuestros primeros pasos en la profesión. Luego analizaremos las diferentes opciones de ejercicio profesional que la odontología nos brinda.

En este sentido podemos optar por las siguientes posibilidades, pudiendo combinar más de una alternativa:

• Ejercicio profesional privado.
• Ejercicio profesional público. Carrera hospitalaria.
• Odontólogo en las fuerzas armadas y de seguridad. Carrera en ejército, marina, fuerza aérea, gendarmería, prefectura, policía, servicio de penitenciaría.
• Carrera docente.
• Carrera de investigador.
• Dirigencia institucional.
• Odontología forense.
• Auditorías y asesoramientos a sistemas de atención.

Esta lista nos demuestra el gran campo de acción que la odontología actual ofrece como salida laboral.

Abordaremos en esta oportunidad el Ejercicio profesional privado.

Entendemos como tal, al que desarrollaremos en consultorios privados para la atención clínica del público que concurre para su atención.

Se podrá ejercer sólo, sin personal auxiliar o con personal auxiliar. También formando equipos con otros odontólogos, con diferentes formas de relacionarse. Por ejemplo:

1. En sociedad con otros colegas, conformando diferentes formas de asociarse.
2. Incorporándose a equipos profesionales ya formados, alquilando unidades dentales, abonando tal alquiler de diferentes maneras, montos fijos o porcentajes.
3. En relación de dependencia de otros odontólogos.

En Ejercicio Profesional II analizaremos las ventajas y las contras de las diferentes modalidades.

Pero por otro lado, la atención de pacientes puede ser totalmente privado, acordando libremente entre las partes el tratamiento a realizar y el presupuesto necesario para su ejecución. También la atención de los pacientes puede hacerse a través de convenios con empresas públicas o privadas que abonan total o parcialmente el tratamiento. Esta relación debe concretarse a través de convenios y contratos. A su vez, estos convenios pueden ser por prestación (se facturan los tratamientos realizados), o por cartera fija de pacientes asignados a uno o varios profesionales. Debe tenerse en cuenta que en la relación entre la empresa que cubre el tratamiento, y el odontólogo, generalmente hay instituciones intermedias que celebran esos contratos. Ampliaremos oportunamente cuando desarrollemos el tema Instituciones, cuáles son las más representativas y qué funciones cumplen.

En próximas entregas y con la colaboración del doctor Cristian Kulzer, seguiremos analizando cómo es el ejercicio profesional.

Dr. Nicolás Ortiz
Odontólogo generalista
Mat. Pcial. 11004
www.costosenodontologia.com.ar